“La tercera es la vencida”, reza un viejo adagio popular que, en las votaciones de Ecuador del pasado domingo se hizo real con la elección de Guillermo Lasso como nuevo presidente electo de ese país, quien asumirá las riendas del gobierno el próximo 24 de mayo, en medio de una creciente crisis social, económica y sanitaria por cuenta de la pandemia de covid 19.
Lasso, de 65 años, consiguió el triunfo en su tercera postulación presidencial aventajando con más del 93 % de las mesas escrutadas a Andrés Arauz, el considerado delfín político del expresidente Rafael Correa, quien ya reconoció su derrota, y afirmó que «seguiré aportando al desarrollo del país cuando se trate de beneficiar a la mayoría de nuestra gente, y de oponernos respetuosa y constructivamente, cuando se busque atender simplemente a privilegios».
Así, Lasso, quien llegó al balotaje como segundo candidato en votación tras la elección del pasado 7 de febrero, logró revertir las cifras y finalmente se hizo con el triunfo, para regir los destinos de su país hasta 2025.
El nuevo presidente electo de Ecuador es un exbanquero que migró a la política desde finales de la década de los 90’s al haber asumido la gobernación de su natal Estado de Guayas; en tiempos de la presidencia de Jamil Mahuad, para posteriormente llegar al Gobierno Nacional como ‘súper ministro de Economía”; cargo que combinaba los Ministerios de Finanzas y Energía.
Posteriormente, saltó a la escena diplomática ocupando el cargo de embajador itinerante durante la presidencia de Lucio Gutiérrez, enfocando su gestión en el fortalecimiento de lazos comerciales y alianzas económicas con algunos países aliados en la región.
